DIOS es ÁGAPE


Ágape es lo que entendemos como Amor Incondicional. Un amor que no espera nada a cambio, que no necesita ser correspondido por la otra persona. Y no juzga quien se lo merece y quien no. 

En la sociedad actual se utiliza la palabra AMOR, sólo en dos contextos. El primero cuando hablamos de nuestra pareja y el segundo cuando hablamos de algún familiar directo como pueden ser nuestros padres o nuestros hijos.

Si le decimos te amo a una persona que no esté en uno de estos dos renglones (pareja o familia) inmediatamente somos mal vistos por la sociedad. Y esto no sucede por casualidad, el sistema nos ha programado para que esto ocurra. 

A pesar de que han transcurrido más de 2000 años desde que Jesús nos dijo: “Amaos los unos a los otros como yo os he amado”, la gran mayoría de las personas no entienden el verdadero significado de esta frase. Muchos se preguntan: ¿Pero como puedo amar a un mendigo de la calle como si fuera uno de mis padres o peor aún como puedo amarlo como a mi pareja?

Para entender el verdadero mensaje de la frase de Jesús, tenemos que referirnos a una de las lenguas originales en la que fue escrito el Nuevo Testamento, es decir el griego. En esta lengua antigua existen tres palabras distintas que al traducirlas la condensaron en una sola, se tradujo como AMOR, pero en realidad tienen tres significados diferentes.

Existen tres palabras griegas para AMOR y son: FILEO, EROS y ÁGAPE.

FILEO es el amor de amigos o el afecto natural entre padres e hijos. Viene siendo un amor fraternal o filial.

EROS el amor entre parejas y que puede tener una connotación sexual.

Y por último la palabra ÁGAPE, que es el amor de Dios. Que en realidad es un aspecto de la naturaleza divina de Dios.

Este es el significado al que se refiere Jesús en la frase “Amaos los unos a los otros”, en realidad decía: “(Agapeaos) los unos a los otros”

Ágape es lo que entendemos como Amor Incondicional. Un amor que no espera nada a cambio, que no necesita ser correspondido por la otra persona. Y no juzga quien se lo merece y quien no. 

Amigos, el AMOR ÁGAPE de Dios no es solo un SENTIMIENTO, en realidad es su esencia, es su naturaleza divina. Es una energía que vibra en muy alta frecuencia. Para que les quede más claro, cuando el apóstol Juan dice: “Dios es AMOR”, en realidad uso la palabra Ágape. Dijo: "Dios es ÁGAPE”. 

La gente de hoy está acostumbrada a pensar en el amor como un sentimiento, pero ése no es necesariamente el caso con el Amor Ágape. El verdadero amor Ágape nace de la voluntad de ayudar al otro y luego se convierte en sentimiento. 

Este es el AMOR que tenemos que practicar para crear ese nuevo mundo de paz, amor y armonía que tanto deseamos. Es una actitud de ayudar y hacer el bien a los demás sin ningún tipo de prejuicios. Sin permitir que nuestra mente nos diga si esa persona se lo merece o no, debe ser un acto de AMOR incondicional. Es decir que no exista ninguna condición para darlo y que no esperemos ningún beneficio. 

Y me gustaría aclarar que el AMOR ÁGAPE se puede sentir por otra persona de nuestro mismo sexo. Aunque tengo que reconocer que este tipo de prejuicio lo tenemos más los hombres que las mujeres. Podemos sentir un AMOR ÁGAPE por otro hombre, sin que eso signifique que comprometemos nuestra hombría. 

Como estamos hechos a imagen y semejanza de Dios, nuestra esencia también es ÁGAPE. 

Cuando seas capaz de dar el AMOR ÁGAPE hasta a las personas que catalogas como tus “enemigos", habrás dado un gigantesco paso en tu evolución. 

Gracias a todos por formar parte de mi realidad. 
Les envío un abrazo energético.

Daniel López de Medrano 
Escritor & Conferencista